La cuarta temporada de The Witcher, la primera con Liam Hemsworth como Geralt de Rivia, llegó a Netflix y ya marcó un récord… pero no precisamente positivo. Con apenas un 50% de aprobación crítica y un 25% del público en Rotten Tomatoes, se posiciona como la entrega peor valorada de la serie principal.
La salida de Henry Cavill, sumada a críticas por un guion irregular y una narrativa dispersa, parecen haber afectado la recepción. Aunque algunos destacan las secuencias de acción y la incorporación de personajes como Regis (Laurence Fishburne), muchos coinciden en que la serie ha perdido su magia.
Rodada junto a la quinta y última temporada, The Witcher 4 muestra a Geralt, Yennefer y Ciri en caminos separados, mientras el continente se desmorona. Con seis episodios ya disponibles, el futuro de la saga se juega en su cierre definitivo.