Joaquin Phoenix ha generado controversia en Hollywood tras abandonar de manera inesperada un importante proyecto cinematográfico a solo cinco días del inicio del rodaje. Phoenix estaba listo para protagonizar una película de romance gay dirigida por Todd Haynes, pero decidió retirarse debido a un ataque de “nervios”, dejando a los productores sin un actor principal. Este inesperado cambio ha desatado la furia de los productores, quienes consideran emprender acciones legales por incumplimiento de contrato.
Los productores están evaluando la posibilidad de demandar a Phoenix, basándose en antecedentes legales como el caso de Kim Basinger en 1993, quien fue llevada a juicio por retirarse de un proyecto. Aunque una demanda podría ser difícil de llevar a cabo, dadas las circunstancias, el actor podría enfrentarse a una resolución monetaria para compensar a los involucrados. Además, existen rumores de que algunos productores podrían intentar marginar a Phoenix de futuros proyectos en la industria.
A pesar de la indignación generada por su decisión, los expertos consideran que la carrera de Phoenix probablemente no se verá gravemente afectada, especialmente con el próximo estreno de Joker: Folie A Deux. Sin embargo, este incidente podría hacer que algunos directores y productores piensen dos veces antes de trabajar con el actor en el futuro.